El mercado de las mascotas ha evolucionado tanto que ya algunos no se conforman con tener un perro o un gato, ni mucho menos con un ave, ni siquiera con una dulce cobaya o un conejito. Hay quienes la dulzura del compañero de vida la encuentran en los ojos huidizos y cazadores de un hurón. Aunque son animales juguetones y divertidos, no todo el mundo está preparado para convivir con un hurón en casa. Pero, ¿son los hurones buenas mascotas? Si estás pensando en comprar uno, lee con atención.
Antes de comprar un hurón
Los animales exóticos tienen el problema añadido de que no todos los veterinarios están cualificados para atender sus necesidades, además de que es más complicado encontrar productos adecuados para ellos. Ten en cuenta que un hurón necesita de muchos cuidados, y requerirá un amplio armario de pertenencias propias, como cualquier mascota, pero tal vez algo más caras, y por supuesto, imprescindibles. Aunque no sea de las mascotas más caras, no pienses tampoco que te saldrá barata.
Lo primero que necesitará un hurón es una serie de vacunas y de chequeos sanitarios regulares, que requieren además de documentación legal. Y es que los propietarios de estos animales son obligados por la ley a tenerlos controlados, debido a las enfermedades que pueden transmitir al hombre. Ten en cuenta que los hurones muerden.
Y en relación a esto que acabamos de decir, a los mordiscos, es de vital importancia tomar precauciones en cuanto a la convivencia. Estas mascotas pueden llegar a tener un carácter muy personal, incluso salir agresivos, y en tal caso, morderá todo cuanto esté a su alcance. También a tí.
Una vida a su medida
Si piensas convivir con un hurón, debes preparar sus habitaciones cuidadosamente con la idea de que no pueda causar destrozos. Tenerlos encerrados en la jaula es mala idea. Deberán tener una, pero necesitan jugar y estirar las piernas al menos unas tres horas al día. En cuanto a la jaula o cierres que les pongas, cuidado, son animales súper elásticos, y caben casi por cualquier rincón y agujero, por pequeño que éste sea.
Alerta si deambula solo por ahí. Recuerda que es un cazador, no dudará en atacar cualquier animalillo que encuentre, como conejos, hámsters o aves. Y a su vez, él mismo podría terminar siendo presa de cualquier perro o gato.
Otras de las dificultades de tener un hurón en casa es en cuanto a su educación y sus gastos extraordinarios. Un hurón no tiene la capacidad de adiestramiento de otros animales. Sólo con suerte lograrás que haga sus necesidades en el cajón especial o W.C. Y es posible que no aprenda a acudir a tus llamadas. Además, duermen una media de 18 horas, eso sí, durante el día. Por la noche, querrán jugar.
Y finalmente, además de necesitar unos cuantos enseres, tales como la hamaca, o el jaulón lo más amplio posible. Vacunas periódicas y, muchas veces, la castración es obligada si resulta muy agresivo.